El perfil del estudiante o estudiante está enmarcado en la ley general de educación y la institución educativa asume como propio el desarrollo y logro del perfil señalado en los artículos 5,91 y 92 de la ley 115 de 1994 y que se define así:
El estudiante es el centro del proceso educativo y debe participar en su propia formación integral. Por ello, la institución se esfuerza en proponer escenarios de educación que fortalezcan el pleno desarrollo de la personalidad de los estudiantes, con acceso a la cultura, al conocimiento científico y técnico, así como, a la formación de valores éticos, estéticos, morales, ciudadanos y religiosos, que le faciliten la realización de vida digna.
A la vez que, fomenta acciones pedagógicas que fortalezcan el desarrollo equilibrado y armónico de las habilidades del alumno, en especial las capacidades para la toma de decisiones, la adquisición, de criterios, el trabajo en equipo, la administración eficiente del tempo, la asunción de responsabilidades, la solución de conflictos y problemas y la habilidad para la comunicación, la negociación y la participación.
El estudiante entonces, debe aprender a educarse, aprender a ser, aprender a obrar y aprender a emprender. Esto exige que todo alumno, construya los conocimientos, habilidades y destrezas, los hábitos y los valores que lo capaciten para asumir la responsabilidad de desarrollarse como persona, individual, social, espiritual y ecológica; todo lo anterior, exige que el estudiante llegue a dominar la capacidad de desarrollo intelectual, psicomotor, afectivo, volitivo, espiritual y de conciencia que le garanticen alcanzar los objetivos de formación integral. Significa formarse una personalidad estructurada en procesos, saberes, competencias y valores consistentes y universalmente
válidos, como la autonomía, la responsabilidad y la trascendencia para “aprender a ser”.
Ello significa, construir personalmente la capacidad, el sentido y comportamiento a partir de la escala de valores de cada persona y de actuar con los mismos, autónoma, responsable y trascendentemente.
En la construcción colectiva y participativa del proyecto educativo institucional P.E.I. se irá explicando y consolidando el perfil del estudiante según el nivel y ciclo. Atendiendo el desarrollo de las competencias básicas que se deben desarrollar según sus capacidades.
Perfil del/la estudiante del nivel preescolar implica que:
▪ Conozca su propio cuerpo y sus posibilidades de acción.
▪ Adquiera identidad y autonomía.
▪ Se desarrolle y crezca de manera armónica y equilibrada, en aspectos como la motricidad, el aprestamiento y la motivación, que son las bases para los futuros procesos escolares.
▪ Desarrolle la creatividad, las habilidades y destrezas propias de su edad y su capacidad de aprendizaje.
▪ Sea capaz de ubicarse en el espacio y el tiempo y ejercite su memoria.
▪ Desarrolle la capacidad de expresarse, relacionarse y comunicarse de tal forma que pueda establecer relaciones de reciprocidad y participación con los demás de acuerdo
con normas de respeto, solidaridad y convivencia.
▪ Que participe activamente en todas las acciones de tipo lúdico con los demás niños y con los adultos
▪ Observe, experimente y explore su medio natural, familiar y social.
▪ Adquiera y demuestre un comportamiento adecuado y acorde con las normas sociales, culturales reconocidas en su medio.
▪ Adquiera hábitos de alimentación, higiene personal, aseo y orden que generen conciencia sobre el valor y la necesidad de la salud.
Perfil del/la estudiante del ciclo primaria indica que es:
▪ Demócrata por excelencia, con una sólida formación de los valores fundamentales para la convivencia en una sociedad democrática, participativa y pluralista.
▪ Crítico, con deseos de saber, con motivación para su auto– aprendizaje, con iniciativa frente al conocimiento y frente a la realidad social.
▪ Capaz de expresarse correctamente porque ha desarrollado las habilidades comunicativas básicas para leer, comprender, escribir, escuchar y hablar en forma espontánea y eficiente en lengua castellana, apreciando y utilizando la lengua como
medio estético.
▪ Una persona que ha desarrollado los conocimientos matemáticos necesarios para manejar y utilizar operaciones simples de cálculo y procedimientos lógicos elementales en diferentes situaciones, así como la capacidad para solucionar problemas.
▪ Participativo/va en el medio físico, social y cultural en el nivel local, nacional y universal de acuerdo con su desarrollo intelectual.
▪ Quien ha asimilado prácticas de higiene y preservación de la salud lo mismo que una sólida formación para la protección de la naturaleza y el ambiente.
▪ Participe de las prácticas de educación física, recreación y deportes que le conduzcan a lograr un desarrollo físico y armónico.
▪ Alguien con valores éticos y morales para la convivencia social y democrática.
▪ Expresivo/va de forma artística con espontaneidad y eficiencia en lo corporal, mediante la representación, la música, la plástica y la literatura.
▪ Quien siente curiosidad por la conversación y la lectura en lengua extranjera.
▪ Responsable de sus conocimiento y práctica de los principios constitucionales, así como de adquirir la habilidad para desempeñarse con autonomía en la sociedad.